Planificación fiscal eficiente: Cómo y cuándo debe hacerlo
Hace dos años, el Congreso de los Estados Unidos, controlado por los republicanos, aprobó la Ley de Recortes de Impuestos y Empleos. La ley, que el Presidente Donald Trump firmó en efecto, hizo que la presentación de impuestos fuera más fácil y sencilla. Más aún si consideramos el ya existente software de preparación de impuestos en línea, junto con algunas prácticas características de servicio al cliente del IRS.
La imagen, sin embargo, no es tan rosada como parece. En 2019, sólo el 40% de los contribuyentes hicieron su propia declaración. El otro 60%, incluyendo los que presentaron sus formularios en línea, confiaron en un contador. Esto a pesar de que los profesionales cobran entre 300 y 500 dólares por incluir deducciones detalladas.
Los impuestos son fáciles
Hacer tus propios impuestos no sólo es simple, sino que también te permite ahorrar dinero y tiempo. Unos pocos pasos sencillos pueden ayudar mucho.
Archivo electrónico
El software digital hace a los contribuyentes preguntas comprensibles sobre sus gastos, categorías de flujo de caja e ingresos. Después de eso, el sitio web rellena automáticamente los formularios apropiados del IRS y los presenta. Compare esto con tener que leer las descripciones técnicas de cada artículo y averiguar qué poner en cada línea.
Servicio de atención al cliente del IRS
Los contribuyentes pueden llamar directamente al IRS para pedir apoyo y ayuda en la preparación de las declaraciones de impuestos. Igual de importante, pueden descargar guías que simplifican los formularios complejos y las instrucciones de presentación.
Presupuestos periódicos
La preparación de estados financieros mensuales o trimestrales es una gran manera de mantenerse a la vanguardia. Asimismo, las empresas de software de presentación electrónica proporcionan a los contribuyentes aplicaciones que les ayudan a hacer un seguimiento de sus finanzas cada vez que hacen una compra deducible.
Planificación fiscal y eficiencia de costes
Durante los primeros cinco meses de 2019, el IRS recibió cerca de 142 millones de declaraciones de impuestos. Más del 90% de ellas (128 millones) se presentaron a través de un software de presentación electrónica.
La mayoría de ellas (56%) fueron revisadas o compiladas con la ayuda de un contador. Sin embargo, independientemente de que un contribuyente prefiera o no trabajar con un profesional, la planificación cuidadosa y la presentación en línea pueden ahorrarle mucho dinero.
En primer lugar, las aplicaciones son mucho más baratas que las empresas de contabilidad. De hecho, los consumidores pueden descargar software por 100 dólares o menos, que es sólo una parte de lo que cuesta pasar por las empresas de preparación de impuestos.
En segundo lugar, el departamento de atención al cliente del IRS puede proporcionar asistencia en áreas por las que un contador normalmente cobraría.
Igualmente importante, incluso si trabajas con un profesional, la planificación temprana de los impuestos sigue siendo una ruta rentable.
La presupuestación periódica, el papeleo organizado y los formularios rellenados digitalmente hacen que el trabajo de un contable sea más fácil y menos largo. Como resultado, los clientes ahorran dinero en honorarios o cargos por hora.
Estados financieros mensuales y trimestrales
En lugar de revisar las finanzas y los documentos justo antes de la fecha límite de presentación, los hogares pueden actualizar regularmente sus presupuestos cada mes o trimestre.
Después de eso, al final de cada año, los contribuyentes encontrarán fácilmente la información que necesitan informar. Esto también evita que el desorden se acumule porque mantiene los recibos y declaraciones organizados.
Además, ciertas aplicaciones y software pueden hacer esta parte aún más fácil. Cuando un usuario hace una compra deducible (como el copago de un seguro médico o el material escolar), anota el gasto en la aplicación.
Los contribuyentes sólo necesitan revisar la información cuando la temporada de presentación llame a la puerta. Posteriormente, las aplicaciones añadirán automáticamente estos elementos a los formularios.
Descubriendo nuevas deducciones
Cuanto más nos acercamos a la fecha límite de abril, más ocupadas están las empresas de contabilidad. Cuando las empresas preparan miles de declaraciones de impuestos, se les hace difícil dar a sus documentos la atención individualizada que merecen.
En este caso, puede ser fácil para ellos pasar por alto ciertas deducciones o reembolsos a los que tiene derecho un consumidor.
La autodeclaración, por otra parte, permite a los contribuyentes identificar estas oportunidades. Después de todo, los individuos entienden sus propias situaciones personales más que nadie.
Los contribuyentes deben dedicar tiempo a la investigación, leer las pautas en línea y contactar al equipo de servicio al cliente del IRS si tienen alguna pregunta.
Estos recursos allanan el camino a deducciones y beneficios fiscales potencialmente valiosos.
El caso de los contadores
Los críticos de los métodos digitales o de auto-archivo pueden sugerir que vale la pena pagar a una empresa profesional. Tienen años de experiencia y expertos experimentados. Los manuales y aplicaciones del IRS no pueden reemplazar eso.
Del mismo modo, los consumidores pasarán mucho tiempo reuniendo documentos y leyendo formularios si optan por autoarchivarse.
Estos críticos, sin embargo, están equivocados. Contadores de renombre nacional y especialistas financieros diseñaron software de impuestos digitales, para empezar. Además, la página web del IRS tiene una lista de compañías de eFiling con las que trabajan y a las que respaldan.
Por último, los individuos y los hogares no necesitan investigar todo el código fiscal. Sólo deben entender los aspectos relacionados con sus gastos, ingresos y flujos de caja personales.
En cuanto al tiempo, preparar sus propios impuestos aún vale la pena. Según el IRS, se tarda un promedio de 16 horas en hacerlo. Cuando se compara con los honorarios de un contador de 300 dólares, la auto-presentación puede ahorrarle casi 20 dólares por hora.
Tenga en cuenta que los contribuyentes todavía tienen que conducir hasta la oficina de la empresa de contabilidad, reunir documentos y comunicarse regularmente con la empresa.
Todo esto llevará al menos varias horas. En otras palabras, la carga de tiempo de la auto-archivación es mínima en comparación con la contratación de una cuenta. Mientras tanto, los ahorros se vuelven aún más lucrativos.
Un proceso sin complicaciones
Como con cualquier otra tarea o responsabilidad, vale la pena estar organizado y bien preparado para sus impuestos. Los consumidores ahorran dinero y tiempo, independientemente de si contratan o no a un contador. Los contribuyentes también pueden descubrir deducciones y créditos que antes desconocían.
Las empresas profesionales de archivo son caras. También requieren que recojas documentos y organices los recibos. Las aplicaciones, por otro lado, son más eficientes. El equipo de atención al cliente del IRS también proporciona apoyo y orientación gratuitos.
A medida que se acerca la temporada de impuestos, trata de averiguar cuánto tiempo te tomó preparar las declaraciones del año pasado. Igual de importante, compara cuánto le pagaste al contador (si trabajaste con uno) y determina si gastar 16 horas en tus impuestos vale la pena el ahorro.
Para mucha gente, lo es. Especialmente cuando consideramos todos los recursos disponibles que hacen que este proceso sea fácil y simple.